Aprendiendo a descansar en Dios

Publicado el 30 de agosto de 2025, 8:41

Autor: Maria Castillo

Fechca 8/30/2025

Hoy me detuve a pensar en lo mucho que me exijo a mí misma. Entre estudios, proyectos y responsabilidades, a veces siento que no hay pausa. No es que las actividades me cansen físicamente; lo que realmente me agota es la insatisfacción interior, esa voz que me dice que siempre debo hacer más.

Ayer compartí un estudio en mi congregación sobre 1 Juan 4:19: “Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.” Me di cuenta de que, aunque creo esta verdad con todo mi corazón, en la práctica muchas veces vivo como si tuviera que ganarme el amor de Dios con mis esfuerzos.

Reflexionando, comprendí que lo que necesito no es hacer más, sino descansar en el amor perfecto de Dios. Él no me mide por mis logros ni por mi productividad, sino que me recibe tal como soy. Descansar en su amor no significa ser pasiva, sino vivir con la certeza de que ya soy amada y aceptada.

Hoy quiero elegir soltar mis cargas de autoexigencia y aprender a disfrutar la gracia de Dios en lo cotidiano: en una conversación con un amigo, en una taza de té caliente, en el silencio de la oración.

¿Y tú? ¿En qué área de tu vida necesitas recordar que ya eres amado por Dios sin condiciones?


Añadir comentario

Comentarios

Todavía no hay comentarios